lunes, 21 de marzo de 2011
Relatos en la obscuridad
Conrad apaga la luz para contar, para relatar … ¡No hay claridad! Vamos a tientas con el relato; En Corazón de las tinieblas Marlow, protagonista que porta la voz del autor, empieza a contar cuando la luz desciende “El sol se puso. La oscuridad descendió sobre las aguas y comenzaron aparecer las luces a lo largo de la orilla” (p 96) y estando en un barco a orillas del Támesis nos va a llevar a lugares inusitados, su relato serpentea por el río adentrándose al corazón de Africa, metáfora de las pasiones más oscuras y de las profundidades de la conciencia humana, pero su forma de contar no es como la de un típico marino cuya sencillez del relato puede ser encerrada dentro de la cáscara de una nuez para Conrad “la importancia de un relato no estaba dentro de la nuez sino afuera envolviendo a la anécdota de la misma manera que el resplandor circunda la luz” (p97) . Leer al resplandor de la luna , sentir el blanco de los ojos que nos miran en la oscuridad, adivinar dónde está el enemigo, intuir la crueldad , sospechar que el mal es aún más descarnado… todo eso vamos a sentir durante la travesía.
¿Quién es Marlow? Y porqué decide irse a Africa, ¿cuáles son sus móviles, el dinero, suprimir el tedio o quizás el miedo? Desde niño le habían apasionado los mapas y había uno que lo fascinaba por un la presencia de un río , en el mapa aparecía como -una inmensa serpiente enroscada con la cabeza en el mar, el cuerpo ondulante a lo largo de una amplia región y la cola perdida en las profundidades del territorio- (p101)
Kurtz se asoma como un enigma y los lectores no sabemos a dónde vamos, se nos borra la temporalidad y el espacio se vuelve metafísico; ¿qué hace un hombre libre en la soledad extrema? Sería la pregunta que nos plantea. Como personaje literario es muy rico , con relieve y ha inspirado a muchos artistas , entre ellos al cineasta Coppola en su multimillonaria película Apocalipsis Now donde Marlon Brando descubre la fuerza de la literatura una noche antes de rodar su papel de Kurtz.
Si Roger Casement nos cautivó en la novela de Vargas Llosa imagínense la rotunda verdad que Conrad descubre al ser amigo y confidente de Casement en el Congo. Conrad nos pone en el mero corazón de las tinieblas
Angélica Breña
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